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miércoles, 10 de julio de 2019

CÓMO FOTOGRAFIAR RAPACES SIN SALIR DE CASA

Sigo sin muchas fuerzas para darme un madrugón y salir al campo temprano, ¡pero no pasa nada! Sólo hace falta mirar al cielo desde la puerta de casa y en un rato pude ver un montón de rapaces cruzando el cielo de Santorcaz. Con la cámara nueva y un poco de pulso, hice el trabajo y puedo venir hoy a mostrar fotos de 5 rapaces que pude ver en 10 minutos. Así que para ver rapaces, lo primero, es mirar al cielo.


Muy lejana, pude ver un águila culebrera (Circaetus gallicus)
Girando y girando esta gran rapaz se fue acercando...
...y en cada giro dejaba ver sus blanquísimas partes inferiores
Al final se podía ver su cola desflecada y muescas en las alas, es decir, 
estaba mudando sus plumas de vuelo, así que debía ser un ejemplar adulto
Casi a la vez una rapaz oscura apareció, y una vez hecha la foto pude comprobar
que se trataba de un aguilucho lagunero (Circus aeroginosus) nacido este año: color
chocolate oscuro, plumaje nuevo sin muescas, y garganta y antifaz dorado
Pasé a casa a por algo, y cuando salí, una aguililla calzada (Hieraetus pennatus) de fase clara
Este individuo volaba realmente bajo y giraba la cabeza para mirar lo que había sobre ella
Son prácticamente inconfundibles si son del tipo claro: primarias y secundarias oscuras y resto de 
las partes inferiores color crema casi blanco
De nuevo a la vez que el águila pasó en vuelo directo otra rapaz muy alta. Hecha 
la foto, era claramente un macho adulto de aguilucho cenizo (Circus pygargus)
Después me quise entretener en fotografiar a los velocísimos vencejos (Apus apus)
y algo pude hacer
Después los chillidos de los cernícalos (Falco tinnunculus) me hicieron levantar la vista, uno 
de ellos salía de la torre de la iglesia...
... y un grupito de vencejos le hacían pasadas amenazadoras pues no es un buen vecino
El cernícalo vigila al vencejo, que tampoco puede hacer gran cosa contra él
El cernícalo abría su cola y alas todo lo posible para coger altura
Acabo con una foto de la noche anterior, con el cielo despejado se podían ver todas las cicatrices de nuestro satélite

jueves, 21 de junio de 2018

VERDECILLOS Y DIFERENCIAS ENTRE MIRLO Y ESTORNINO NEGRO

Este domingo me despertó la alarma, pero no podía abrir los ojos. Literalmente. Me lavé las legañas y salí al campo, pero al rato, la conjuntivitis que había incubado durante la noche no me dio margen y tuve que volver a casa. Antes pude hacer algunas fotos que hice por las cercanías de Santorcaz: El Lavadero, la Hontanilla y la Ermita de la Soledad.

En el Lavadero, un joven jilguero (Carduelis Carduelis) compartía cable con tres jóvenes golondrinas (Hirundo rustica)

En el borde del Lavadero un verdecillo (Serinus serinus) estuvo pensando si bajaba a beber agua conmigo delante

En la Hontanilla, una cogujada montesina (Galerida theklae)
me vigilaba de reojo mientras tomaba el sol

Junto a una noguera vieja me escondí un rato y aparecieron varios verdecillos...

... éste se estiraba y acicalaba las plumas.

En otra rama, más cerca y mejor iluminado, otro se puso a cantar

Con la garganta inflada y el pico abierto los pequeños
verdecillos tienen uno de los cantos más melodiosos.

A continuación podéis oír su bonito canto compitiendo con el de un ruiseñor


En la Ermita de la Soledad pude fotografiar a un vencejo (Apus apus)... entrando al nido, claro, porque en vuelo es casi imposible
Allí anidan los gorriones (Passer domesticus), y los machos continúan aportando material al nido

También anidan los estorninos negros (Sturnus unicolor) con su plumaje brillante,
plumas puntiagudas, patas rosadas y pico amarillo de base azulada
Los mirlos (Turdus merula) tienen en cambio el negro mate,
el pico naranja y el anillo ocular naranja

domingo, 4 de mayo de 2014

COLLALBAS NEGRAS EN EL ECCE HOMO

Este pasado jueves, aprovechando que era día festivo, subimos con unos amigos al Ecce Homo, uno de los cerros que rodea a la ciudad de Alcalá de Henares. Un intenso sol, alguna cuesta, un par de tortillas y buena compañía hicieron que disfrutásemos de un estupendo día de campo.
En cuanto a naturaleza, tampoco estuvo mal, en un corto trecho se atraviesan varios ambientes, cada uno con su fauna asociada. Destacan las repoblaciones de pinos con diferentes edades aunque en la actualidad han plantado cosas tan diversas como lentiscos y madroños.

Repoblaciones recientes de pinos carrascos (Pinus halepensis)
Los trigueros, habitantes de espacios abiertos (Emberiza calandra)
 aún habitan en pinares jóvenes
En pinares maduros, los pinzones (Fringilla coelebs) son los más numerosos
En algunos lugares sin embargo aún perviven algunos parches de monte autóctono formado por encinas (Quercus ilex) y coscojas (Quercus coccifera).

En término medio, monte autóctono rodeado de pinares
Junto a los pinares, barrancos cubiertos de esparto (Stipa tenacissima) y cortados arcillosos son los hábitats más extendidos.

Cárcavas y barrancas en las arcillas de Alcalá
Las chovas piquirrojas (Pyrrhocorax pyrrhocorax) aprovechan los cantiles para anidar
Cogujada montesina (Galerida theklae) otro habitante de los matorrales
Enormes cañahejas (Ferula communis) llamaron nuestra atención
Ruinas como el antiguo castillo árabe de Alcalá o antiguas explotaciones ganaderas también ayudan a la fauna a encontrar cobijo en sus recovecos.

Una collalba negra (Oenanthe leucura) en uno de los lienzos en ruinas del castillo,
 con material en el pico, indicio que muestra la existencia de un nido cercano
Otra collalba, en actitud suplicante se dirige a la collalba de la foto anterior
En esta fotografía se aprecia perfectamente el curioso diseño de sus plumas caudales
Una salamanquesa (Tarentola mauritanica) se pasea sobre un graffiti
Por supuesto, el propio aire, también es un lugar a donde dirigir la cámara en busca de sus habitantes. En lo alto del Ecce Homo, se congregaban un gran número de vencejos (Apus apus) para capturar a los insectos que la brisa levantaba al chocar con la ladera.

Decenas de vencejos se alimentan de plancton aéreo, con la Sierra de Guadarrama
 al fondo y mi facultad en primer término, a la derecha ¡qué tiempos!
La cercanía del vertedero de Alcalá hacía también que el trasiego de cigüeñas, grajillas, garcillas bueyeras y milanos fuese continuo.

Milano negro (Milvus migrans) con su típica cola levemente escotada

En fin, en la entrada siguiente contaré lo que dio de sí el resto del macropuente, ya en Santorcaz.